Coaching
Este instrumento fue desarrollado en la década de los 80 por las ciencias humanas y posteriormente adaptado al contexto de la gestión organizacional.
Surgió de la necesidad del personal directivo de poder lidiar con tareas cada vez más complejas en contextos contradictorios. Una contradicción fundamental consiste en que empresas, administraciones públicas e instituciones sociales están estructuradas y organizadas según principios lógico-racionales.
Sin embargo, en el momento de ejecutar sus tareas y tomar decisiones, sus miembros se rigen por aspectos más humanos y menos lógicos, como sus valores, intereses personales o de ciertos grupos, convicciones, sentimientos, etc.
Ahora, ¿qué beneficios concretos tiene coaching en un marco organizacional? Entre otros
Aumenta el rendimiento, ya que utilizar de forma consciente e intencionada los recursos disponibles y las habilidades desarrolladas lleva a un uso más eficiente y sostenible de los mismos.
Mejora la toma de decisiones: El coaching proporciona herramientas y métodos que ayudan a esclarecer la situación y la propia posición.
Desarrolla cualidades de liderazgo: el proceso de coaching conlleva inherentemente al desarrollo de habilidades para dirigir personas y equipos con mayor eficacia.
Mejora el alcance de objetivos con métodos probados para ayudar a los empleados a definir y alcanzar sus objetivos profesionales.
Mis ofertas de coaching
Lo que dicen mis clientes
– organización y priorización de tareas como líder de mi área. Manejo del tiempo, desarrollo de herramientas de estructura en el trabajo.
– comunicación con mi jefatura, cómo lograr cercanía y apoyo. Logré sinergia y colaboración, lo que se muestra en un trabajo mucho más fluido y armonioso.
– entrega de feedback asertivo a las personas a mi cargo, entender el comportamiento del equipo y aprender a interactuar con diferentes caracteres y situaciones complejas.
– reconocer los logros e hitos, hallar tranquilidad en los avances conseguidos, tener una visión clara de mi propio rendimiento.
– me ayudo también a mirarme más cómo individuo, reconocer mis necesidades, aprender a separar y poner límites a los requerimientos laborales y los de casa encontrando así establecer un mejor equilibrio.
Todo esto me ha regalado principalmente paz y estabilidad. Sin embargo también reconozco que mi autoestima está mucho más arriba de lo que estaba, y poco a poco con su ayuda voy siendo cada vez más feliz de lo que era. ”
